Elecciones en Ecuador: Segunda Vuelta 2021
La Segunda Vuelta Electoral ha demostrado que los egos y las pasiones de líderes políticos han quedado de lado para unirse frente a un objetivo, vencer la receta socialista que tanto daño ha hecho a la región y que durante 14 años se apoderó del Ecuador, debilitando instituciones y restringiendo libertades.
El resultado de esta elección no se trata de personalismos, se trata del comienzo de un nuevo capítulo que necesariamente debe pasar por establecer un gran acuerdo nacional, que permita la gobernabilidad por el bienestar de los ciudadanos. Los ecuatorianos han escogido la opción que menos ponga en riesgo su capacidad de progreso, que dé oportunidades de desarrollo y sobretodo que no genere división, violencia u odio entre actores políticos y sociales.
El resultado de esta elección no se trata de personalismos, sino del comienzo de un nuevo capítulo que necesariamente debe pasar por establecer un gran acuerdo nacional
Considero que el rol de las fuerzas políticas participantes en esta contienda, con relación al Control Electoral, denota responsabilidad y es lo que da la tranquilidad a los resultados de la noche del 11 de abril. Sin embargo, el compromiso no fue únicamente de los partidos sino también los ciudadanos, que se anotaron como observadores nacionales, internacionales y delegados de las organizaciones ante las Juntas receptoras del voto. Ellos velaron por la transparencia del proceso durante toda la jornada democrática y es propicio reconocerlo.
Tan importante es la diafanidad, que un país entero e inclusive el derrotado en las urnas, tuvo la altura suficiente para reconocer los resultados. Un panorama eufórico sí, se sintió en Ecuador, pero esta vez, después de tantos años sin el fantasma del fraude rondando. Ese es el ambiente sereno al que muchos le apostaron con su voto, ahora es el momento de esperar las acciones que generen confianza ciudadana y cambie el rostro del Ecuador al mundo.
*La autora es Politóloga y Analista en Radio 11Q (104.9 FM)